Estas son algunas claves en la relación entre salud bucodental y alimentación que te damos desde Clínica Armilla:
¿Qué alimentos consumes?
No es lo mismo comer un plato hecho en casa que precocinado. Nuestro cuerpo lo nota, y nuestra sonrisa también. Este tipo de comida (precocinados, comida rápida…) suele ser la que lleva más cantidad de azúcares y carbohidratos. Esto favorece la erosión del esmalte y la formación de caries dental. Para mantener una sonrisa sana es aconsejable el consumo de alimentos ricos en calcio, proteínas, flúor y vitaminas. Hablamos de alimentos como las frutas, las verduras o los lácteos. Algunos tipos de pescado incorporan flúor, un gran aliado para cuidar tu sonrisa. También es fundamental mantenerse hidratado, para estimular la salivación y evitar episodios de xerostomía.
Por otro lado hay alimentos como el vino, el café, los frutos rojos, el ajo… Que manchan los dientes o favorecen el mal aliento. Para evitarlo es fundamental moderar su consumo y potenciar la higiene bucodental después de las comidas.
¿Cuándo comes?
Lo ideal es hacer cinco comidas diarias para no pasar hambre. Es importante que estas comidas sean equilibradas para no caer en los excesos. Pero el ritmo de vida diario a veces dificulta seguir estas pautas saludables. Un hábito muy común es picar entre horas alimentos que sacien el hambre, como los dulces. Un truco para que este hábito no pase factura a tu sonrisa es cepillar los dientes o bien sustituir estos dulces por una pieza de fruta o frutos secos, aunque estos últimos pueden quedarse pegados entre los dientes.
¿Y el azúcar?
Como es sabido el exceso de azúcar es muy perjudicial para la salud bucodental. Es la causa principal de desarrollo de caries dental, la patología más extendida a nivel mundial. Existen diversos trucos para evitar el exceso de azúcar:
- Evitar la bollería y los caramelos.
- Moderar las bebidas energéticas y refrescos.
- Masticar chicle sin azúcar.
Mantener una alimentación sana y equilibrada no sólo te ayudará a sentirte mejor; también te ayudará a sonreír mejor, con unos dientes más sanos y radiantes. Por último no olvides la importancia de visitar a tu dentista de confianza al menos dos veces al año. Eliminar los restos de alimentos después de las comidas es esencial para evitar la acumulación de biofilm oral y lucir una sonrisa sana durante más tiempo.